Aumentar la inteligencia del edificio, disminuir el consumo de energía

La creciente urbanización del mundo está contribuyendo a la utilización de importantes cantidades de energía. La demanda global de refrigeración se ha duplicado en menos de 20 años. Y agua y energía van de la mano. En general, las bombas de agua representan actualmente una gran parte del consumo mundial de electricidad, pero con soluciones de bombeo más eficientes desde el punto de vista energético, esta cantidad puede reducirse en gran medida.

Como sabemos, este crecimiento del consumo energético es uno de los principales impulsores del cambio climático. En algunos lugares, el cambio climático está dando lugar a graves sequías, mientras que en otros se prevé que los efectos en nuestro clima causen un 30% más de precipitaciones, provocando inundaciones extremas, así como la intrusión de aguas residuales y marinas que contaminan nuestras aguas subterráneas y afectan a la calidad del agua. Las inundaciones afectan a aproximadamente 250 millones de personas en todo el mundo y provocan pérdidas anuales por valor de 40,000 millones de dólares.

Existen muchas soluciones inteligentes de agua disponibles, pero desafortunadamente no se implementan con la misma velocidad que vemos en la industria energética, como la eólica y la solar. Por lo tanto, en los edificios comerciales el consumo responsable de agua y las soluciones energéticamente eficientes deben priorizarse para ayudar a combatir el cambio climático al que nos enfrentamos.