Coste del ciclo de vida, o LCC, es un concepto usado para determinar el coste total de una bomba o un sistema de bombeo a lo largo del tiempo. En este curso, te mostraremos los factores más importantes al calcular el coste del ciclo de vida.

¿Pero por qué es importante saber sobre el coste del ciclo de vida? Cuando invertimos en un nuevo sistema de bombeo o sustituimos uno antiguo, tendemos a centrarnos en el coste más obvio, el coste inicial. Pero en un período de 20 años, el coste inicial solo constituye una pequeña parte del coste total, es la punta del iceberg.

Debajo hay un grupo de costes igual de importantes que debemos analizar. Estos son los costes de instalación y puesta en marcha, los costes energéticos, los costes de funcionamiento, los costes de mantenimiento, los costes de paradas por avería, los costes medioambientales y los costes de retirada del servicio y eliminación. Cuando los juntamos todos, obtenemos el coste total de un sistema de bombeo durante un período de tiempo.

En el caso de los edificios comerciales, como los edificios de oficinas, los hospitales y los centros comerciales, los 3 factores más importantes al calcular el coste del ciclo de vida son los costes iniciales. Estos son el precio de compra, los costes de mantenimiento y los costes energéticos del sistema.

Esto significa que una bomba tiene más de un precio. Además de mirar la etiqueta de precio con el coste inicial, también tienes que pensar en los costes de mantenimiento a lo largo del tiempo. Y, por último, pero no menos importante, debes fijarte en el elemento más caro de todos, los costes energéticos. Cuando inviertas en una bomba nueva, asegúrate de haber comprobado las 3 etiquetas de precio.