Veamos cómo ahorrar con un análisis del coste del ciclo de vida.

En este caso ficticio, el equipo de gestión de instalaciones del hotel inició un proyecto de modernización del sistema HVAC para ahorrar energía. Se cambió el sistema de agua refrigerada de caudal constante a caudal variable, lo que permitía al sistema adaptarse a la carga de refrigeración. Así se obtuvo un ahorro sustancial con bombas de velocidad variable.

Veamos 3 soluciones de bombeo diferentes con 3 precios totales distintos.

La 1.ª solución es un sistema de caudal variable con bomba de velocidad constante.

La 2.ª solución es un sistema de caudal variable con bomba de velocidad variable. La bomba funciona en modo de presión diferencial proporcional.

La 3.ª solución es idéntica a la 2.ª, con la bomba funcionando en modo de presión diferencial proporcional, pero esta vez con la función de curva "cuadrática" activada. La bomba simula la presión necesaria en el sistema a cualquier caudal sin necesidad de instalar sensores de presión remotos. Esto da una curva de bomba optimizada que brinda un mayor ahorro energético.

Como puedes ver, el coste total de propiedad de los sistemas varía mucho a lo largo de 20 años. Observa los precios iniciales comparados con los costes totales. Como era de esperar, el sistema con bomba de velocidad constante es el más caro. Siempre deben evitarse las bombas sin control de velocidad.

El sistema más económico es el tercero.

El sistema de caudal variable funciona con una bomba de velocidad variable. La bomba funciona en modo de presión proporcional diferencial con la función de curva cuadrática activada. ¿Y cuánto se tarda en amortizar el alto coste inicial del sistema más rentable? En la mayoría de los casos, menos de un año. De media, el tiempo de amortización de los sistemas con bombas de velocidad variable frente a las bombas sin control puede contarse en meses, dependiendo del tamaño de la bomba. A partir de ahí, ahorras dinero y proteges el medio ambiente durante muchos años.