En este módulo, te presentamos los centros de datos. Aprenderás claramente qué son, su importancia, los diferentes sistemas de clasificación en los que se encuadran, y las consideraciones clave que rigen su funcionamiento.

En la era digital actual, los centros de datos desempeñan una función crucial. En 2006, el IoT contaba con 2000 millones de dispositivos inteligentes. Para 2020, la cifra había aumentado hasta los 200.000 millones. El uso de datos se ha extendido tanto que casi todas las personas del planeta dependen de ellos. Conforme estas cifras continúan creciendo, la importancia de los centros de datos se hace cada vez más evidente.

¿Y qué es un centro de datos? Un centro de datos alberga numerosos ordenadores de alto rendimiento, conocidos como servidores, y equipos de red. Esta configuración posibilita una computación eficiente a gran escala. Detrás de nuestros dispositivos inteligentes, los centros de datos son cruciales para gestionar tareas de procesamiento críticas, asegurando un funcionamiento ininterrumpido del servicio. Nuestra dependencia de los centros de datos es considerable, y cualquier interrupción podría provocar problemas importantes.

Veamos los 5 tipos diferentes de centros de datos y lo que ofrecen. Hiperescala: Estos son los centros de datos más grandes y ofrecen un rendimiento y una eficiencia de recursos de primera categoría. Ofrecen aplicaciones y servicios robustos y escalables, esenciales para el almacenamiento en la nube y del "big data".

Colocación: Los centros de colocación ofrecen instalaciones compartidas y soporte para facilitar a las empresas la conexión al software como servicio (SaaS) o plataforma como servicio (PaaS), lo que permite un escalado rentable con una complejidad y coste mínimos. Varían en escala desde minoristas hasta mayoristas en función de las necesidades de espacio del cliente.

Empresa: Estos centros de datos suelen construirse en las instalaciones de una organización para atender a las necesidades de procesamiento y almacenamiento de datos, brindando un mayor control y visibilidad. Los centros de datos empresariales suelen ser usados por grandes corporaciones para garantizar la seguridad de los datos, cumplir normativas y mantener el negocio.

Telecomunicaciones: Estos centros de datos exigen una alta conectividad y son cruciales en la entrega de contenidos, los servicios móviles y los servicios en la nube.

Perímetro: La computación periférica implica el procesamiento de datos en el perímetro de la red en lugar de en un almacén de datos centralizado o en la nube. Los centros de datos periféricos se ocupan de tareas como el IoT, la transmisión de contenidos, los vehículos autónomos, los drones, la realidad virtual (RV) y la inteligencia artificial (IA). Al estar cerca del punto de uso, las instalaciones periféricas reducen en gran medida los retrasos para los usuarios finales.

Hasta aquí la definición de los centros de datos y su importancia en la moderna infraestructura digital actual.