Demand Driven Distribution
Descubre cómo puedes obtener un importante ahorro económico mediante la gestión de la presión con la solución de bombeo inteligente Demand Driven Distribution (DDD). La solución DDD puede reducir las pérdidas por fugas y los costes de funcionamiento y mantenimiento, y también incrementar la eficiencia y el confort.
La gestión de la presión representa una gran oportunidad de obtener un importante ahorro económico
para las empresas de suministro de agua.
En este módulo, descubrirás cómo gestionar la presión de forma eficaz utilizando una solución de bombeo inteligente para reducir el agua no contabilizada (NRW) y el coste energético del bombeo.
Veamos cómo funciona la solución de bombeo inteligente de Grundfos, denominada Demand Driven Distribution o DDD.
La solución DDD incorpora el controlador de bombas CU 354 de Grundfos en un sistema avanzado de gestión de la presión.
La combinación de la medición continua de la presión de la red y el control inteligente de las bombas permite una gestión eficaz de la presión en el sistema de distribución de agua.
Para ello, y como parte de la solución DDD, se instalan dispositivos de registro de datos de los sensores en puntos críticos de la red de distribución.
Los datos de presión de la red obtenidos de forma constante se transmiten automáticamente una vez al día a la estación de bombeo por SMS. El algoritmo de autoaprendizaje del controlador de Grundfos usa los datos medidos de presión de la red para efectuar un control dinámico de presión proporcional en la estación de bombeo y mantener la presión de la red en un valor predeterminado y estable en todo momento.
En otras palabras, el controlador de las bombas usa los datos de presión de la red para generar a diario un modelo hidráulico y determinar la curva óptima de punto de ajuste de presión en función del caudal para el funcionamiento de la estación de bombeo.
El aspecto más útil del sistema avanzado de gestión de la presión DDD es que posee capacidad de autoaprendizaje y todo se hace de manera automática. Lo único que el operador de la empresa de suministro
de agua tiene que hacer es introducir los puntos de ajuste de presión críticos de la red, y la solución DDD se encargará del resto. Incluso ajustará el sistema después de instalarlo.
Ahora, veamos las ventajas de una gestión eficaz de la presión para las empresas de suministro de agua. La solución DDD ofrece dos ventajas inmediatas y tangibles: reducción de las fugas y ahorro energético. Examinemos con mayor detalle estas y otras ventajas adicionales de la solución DDD.
Ventaja 1: reducción de las fugas:
Los valores altos de NRW afectan sensiblemente a la viabilidad económica de las empresas de suministro de agua debido a la pérdida de ingresos y al incremento de los costes de funcionamiento.
- La gestión óptima de la presión mediante una solución DDD estabiliza y reduce la presión media, y consigue una reducción media de las fugas de un 15 % en función de los materiales de las tuberías y los tipos de fuga.
- Incluso aunque la red de distribución transporte menos agua, la reducción de las pérdidas de agua incrementa la proporción de agua facturada y, por consiguiente, los ingresos.
Ventaja 2: eficiencia energética:
Los sistemas de suministro de agua conllevan un enorme consumo de energía en las distintas etapas de producción y suministro de agua. A menudo se emplea una cantidad excesiva de energía, lo que hace que la presión de la red de agua sea demasiado alta y se lleguen a producir roturas de tuberías.
La minimización del exceso de presión puede reducir el coste energético de bombeo un 25 % de media.
Ventaja 3: costes de funcionamiento y mantenimiento:
Las empresas de suministro de agua se enfrentan a diversos desafíos relacionados con las redes de distribución y la renovación de estas de aquí a entre 10 y 30 años. El proceso será caro, lo que requiere urgentemente priorizar y optimizar estas inversiones.
- Una reducción de un 10 % en la presión media hace disminuir los costes del control de las fugas activas un 10 %.
- La estabilización de la presión durante un período de 24 horas ha demostrado ser un método útil para reducir las roturas de tuberías. Los estudios muestran que, con una disminución de la presión del 16 % por la noche, se puede reducir la tasa de roturas de tuberías un 50 %.
Ventaja 4: mayor confort:
La satisfacción de los usuarios finales y la reputación pública son dos parámetros muy importantes para las empresas de suministro de agua, cuyos clientes esperan recibir un suministro de agua que tenga una presión adecuada y estable.
- La solución DDD permite al operador establecer una presión objetivo para la red, y el controlador se asegurará de que el valor objetivo se cumpla de forma constante, incluso en los períodos de máxima demanda. Asimismo, la estabilización de la presión hará que los resultados sean más satisfactorios para los usuarios finales.
Además de las ventajas anteriores, es decir, la reducción de las pérdidas de agua, la mejora de la eficiencia energética, la reducción de los costes de funcionamiento y el mayor confort, todo esto produce un impacto sustancial en los costes de inspección y mantenimiento a largo plazo, debido a una vida útil más extensa de la red de tuberías.
Hemos comprobado que la solución Demand Driven Distribution de Grundfos contribuye a reducir la frecuencia y los efectos de los fallos en las tuberías de agua, ya que adapta la presión a la demanda real de agua y la estabiliza, tal como se mencionó anteriormente. Esto ahorra dinero a la empresa de suministro de agua y reduce el coste total del sistema de distribución de agua.
Repasemos los temas que hemos tratado en este módulo:
- Cómo la solución DDD combina la medición precisa de la presión de la red y el control inteligente de las bombas de la estación de bombeo en función de los valores medidos para conseguir una gestión eficaz de la presión.
- Cómo esto reduce las fugas y las pérdidas de agua, mejora la eficiencia energética, hace disminuir los costes de funcionamiento y mantenimiento e incrementa el confort.
- Cómo la reducción de las roturas de tuberías y la vida útil más extensa de las redes de tuberías incrementan la cantidad facturada de agua y reducen el consumo energético y los costes de la infraestructura.