Funciones de protección de la bomba Grundfos SQ/SQE: Protección de tensión
Descubre cómo una bomba SQ/SQE ajusta su funcionamiento según la tensión de suministro real, proporcionando al instalador menos visitas de servicio y al propietario una bomba de larga duración.
Las gamas de bombas sumergibles Grundfos SQ/SQE están equipadas con 3 exclusivas funciones de protección.
En este vídeo, trataremos la protección de tensión. Antes de hablar de las gamas SQ/SQE, echémosle un vistazo a una bomba sumergible convencional de 4" y su reacción ante las variaciones de tensión en un escenario en el que el estándar es de 230 V.
En muchas partes del mundo, la tensión de suministro varía bastante. Esto afecta negativamente a los equipos eléctricos cuyo rango de tensión de suministro es muy limitado. Tomemos, por ejemplo, una bomba sumergible convencional de 4".
Cuando la tensión de suministro cae, la corriente del motor aumenta y ello da lugar a un incremento de la temperatura del motor. Si la tensión de suministro cae más del 10 % (por debajo de 207 V), el contactor del motor, simplemente, detiene la bomba debido al alto nivel de la corriente.
Cuando la tensión aumenta y entra de nuevo en el rango de tensión aceptable, puede que la bomba no pueda reanudar su funcionamiento automáticamente si el rearme del contactor del motor debe realizarse manualmente.
Si la tensión de suministro aumenta hasta un nivel superior al valor nominal, la velocidad del motor y, como resultado, la carga, aumentan también. Esto provoca un aumento de la corriente y la temperatura del motor.
Cuando la tensión de suministro supera los 252 V, el contactor del motor detiene la bomba. Las gamas SQ/SQE están mejor preparadas para hacer frente a tales variaciones. En primer lugar, estas bombas son capaces de funcionar dentro de un rango de tensión de suministro muy extenso.
También son capaces de ajustar automáticamente su funcionamiento de acuerdo con la tensión de suministro real, manteniendo la corriente y la temperatura del motor por debajo de los límites máximos.
Una bomba SQ/SQE con una tensión nominal de 230 V suministrará un caudal de agua siempre y cuando la tensión de suministro permanezca por encima de 150 V.
De hecho, ofrecerá su máximo rendimiento con tan solo 198 V. Si la tensión de suministro cae por debajo de 198 V, la bomba reducirá la velocidad del motor para mantener la corriente por debajo del límite superior y evitar su sobrecalentamiento.
Sin embargo, seguirá suministrando agua a la vivienda y, hasta que la tensión de suministro no caiga por debajo de 150 V, las bombas SQ/SQE no dejarán de funcionar. Lo mismo sucede cuando la tensión de suministro aumenta.
De 230 V a 264 V, el rendimiento no se verá afectado y la corriente del motor disminuirá. En determinadas condiciones, seguirá funcionando si la tensión de suministro sigue aumentando.
En última instancia, la bomba se detendrá para protegerse. Cuando la tensión de suministro entra de nuevo en el rango de tensión aceptable, las bombas SQ/SQE arrancan automáticamente.
Si la tensión de suministro varía menos de un 14 % del valor nominal, el rendimiento no se ve afectado. Las ventajas están bastante claras. Para el instalador, la protección de tensión de la gama SQ da lugar a menos visitas técnicas.
La bomba está mejor preparada para aceptar variaciones en la tensión de suministro, incluidas las suficientemente grandes como para detener una bomba convencional. Para el propietario, esta protección significa un suministro de agua continuo dentro de un amplio rango de tensión.
Además, contará con una bomba que podrá usar durante mucho tiempo, pues las incidencias por sobrecalentamiento se reducen al mínimo absoluto.